Nacida en Viena en 1879, hija del pintor Schindler, Alma dedica toda su existencia a relacionarse con grandes genios del arte. El pintor Klimt es el primero en ejercer una gran fascinación sobre ella, de manera que la convierte en modelo de algunas de sus obras, "El Beso" entre ellas. Es con el compositor Gustav Mahler con quien se casa, renunciando a sus aspiraciones musicales para dedicarse por entero a él. Antes de quedarse viuda ya había iniciado una relación con el arquitecto Walter Gropius, a quien abandona por el pintor Oskar Kokoschka, dejando a este para volver nuevamente con Gropius y casarse con él. Tan sólo dos años después, establece una relación con el poeta judío Franz Werfel. A pesar de sus relaciones con los judíos( Malher y Werfel), no oculta su antisemitismo, llegando incluso a practicar cierto catolicismo manteniendo una relación amorosa con un joven sacerdote simpatizante de los nazis. Es, huyendo de estos, cuando deben abandonar Viena instalándose en Francia, pero el avance del nazismo en Europa, les empuja hacia América, instalándose en Nueva York hasta su muerte en 1964.
Cuando hace tiempo leí esta biografía, me gustó tanto, que sentí la necesidad de volver a disfrutar de su lectura.
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